Un equipo de astrónomos de Estados Unidos y Venezuela localizó un grupo de 168 estrellas jóvenes en la constelación de Orión, lo que permitiría conocer en qué momento se formaron los planetas de algunos sistemas estelares.
Los astrónomos de la Universidad de Yale, Estados Unidos, y del Centro de Investigaciones de Astronomía, Venezuela, informaron que estas estrellas jóvenes poseen una masa de aproximadamente la mitad del Sol y se encuentran a unos mil 400 años luz de la Tierra.
Las observaciones comenzaron hace tiempo y la región explorada se caracteriza particularmente por la formación continua de nuevas estrellas.
“Si es que queremos saber en qué momento se forman los planetas, deberemos buscar estrellas lo bastante jóvenes y estudiar el medio ambiente en el que se desarrollan”, manifestaron los astrónomos.
Para los investigadores, se trata sólo de “una punta del iceberg”, ya que este grupo de 168 estrellas pertenece a la primera sección investigada, mientras que la zona completa bajo observación tiene seis veces su tamaño.
Por estas proporciones, los astrónomos estimaron que cuando el estudio se termine habrán catalogado miles de estrellas nuevas.
Las jóvenes estrellas vistas hasta hoy tienen una edad de entre uno y 10 millones de años y muchas de las más jóvenes presentan claros indicios de poseer un disco protoplanetario de gas y polvo, mientras que las otras parecen haber perdido este disco.
Al respecto, los astrónomos creen que la falta de este disco sugiere que éste se ha coagulado para formar planetas no visibles desde la Tierra.
“Si esto es cierto, indicaría que las estrellas parecidas al Sol pueden ver crecer planetas a su alrededor en períodos inferiores a los 10 millones de años”, comentaron.
El equipo de astrónomos dio a conocer que las imágenes de la región de Orión fueron obtenidas gracias a una cámara digital CCD Mosaic desarrollada tanto en Yale como en Venezuela, la cual fue instalada en un telescopio de ancho campo del Observatorio Nacional de Venezuela.
La técnica implica fotografiar repetidas veces la misma región interestelar, lo que permite identificar las estrellas más débiles y jóvenes. Además utilizan un software especial programado para elegir las estrellas candidatas, que son aquellas que varían su brillo a lo largo de días o semanas.
Observaciones posteriores con los telescopios de los Wisconsin-Indiana-Yale National Optical Astronomical Observatories (WIYN) y del Smithsonian Astrophysical Observatory permitirán entonces confirmar que se trata efectivamente de estrellas jóvenes.
Aunque las investigaciones se han centrado en este tipo de estrellas, también se han observado otras más viejas para determinar las escalas de tiempo que se ven implicadas en la coagulación de los granos de polvo que formarán cuerpos mayores tales como planetas, concluyeron los científicos.