Sven Goran Eriksson, el primer técnico extranjero en la historia de la selección inglesa, hizo un debut de ensueño, con una victoria 3-0 sobre la cotizada España en un partido amistoso.
Nick Barmby puso a los ingleses arriba a los 38 minutos y Emile Heskey y Ugo Ehiogu dieron forma definitiva al triunfo en el complemento.
El arquero Nigel Martyn redondeó la fiesta atajándole un penal a Javier Moreno sobre el final del partido, en el que los ingleses maniataron a jugadores de la clase de Raúl González, Luis Enrique y Josep Guardiola.
La victoria tiene un sabor especial si se toma en cuenta de que se logró ante un equipo en el que abundan jugadores que dominaron la Copa de Campeones del año pasado, en cuya final jugaron Real Madrid y Valencia.
Luego de media hora de juego aburrido, Inglaterra despertó y se acercó al arco del portero del Real Iker Casillas, quien tuvo una buena intervención ante un cabezazo al segundo palo de Nicky Butt, pero no pudo hacer nada en la jugada del primer gol.
Un cabezazo de Andy Cole le sirvió el balón a Michael Owen, quien habilitó en el momento justo a su compañero en Liverpool Barmby, cuyo tiro dejó sin posibilidades a Casillas.
España casi empata al comenzar el segundo período, en que Gaizka Mendieta le robó un balón al debutante Gavin McCann y su tiro desde posición difícil cruzó el arco.
Inglaterra aumentó a los 55, cuando Casillas salió mal a cortar un tiro de esquina y el balón le quedó servido a Heskey para que anotase.
Otro córner, sorprendió a la defensa española y Ehiogu cabeceó sin que lo molestaran, anotando el tercero a los 70.
A poco del final el árbitro sancionó un penal para España por una supuesta falta de Ehiogu contra Moreno. El propio Javi se encargó de cobrar y su tiro fue desviado por Martyn, quien había reemplazado a David James en el segundo tiempo. Javi le pegó mal y Martyn contuvo el remate arrojándose hacia su izquierda.